Nos encargaron la tarea de decorar un apartamento destinado a alquiler vacacional, situado en el encantador centro histórico de Málaga. El reto principal fue el espacio limitado del salón, lo que nos obligó a pensar de manera creativa en la selección y colocación del mobiliario. Finalmente, nuestros diseñadores de interiores seleccionaron un sofá compacto de dos plazas y una mesa de comedor pequeña, ubicada estratégicamente en una esquina del salón para maximizar el espacio disponible. Para el dormitorio, que también era pequeño, colocamos la cama entre dos ventanas para aprovechar la luz natural. Elegimos tonos claros para las paredes y textiles, que ayudan a crear una sensación de mayor amplitud y luminosidad. Estas intervenciones estratégicas han optimizado el uso del espacio y mejorado el atractivo estético del apartamento, aumentando su potencial para atraer a visitantes que buscan un alojamiento cómodo y bien diseñado en el corazón de Málaga.